¿Les resulta familiar el “no me alcanza”?

por Fernanda Bolagay

Ya lo hemos visto, uno de los errores más grandes que comenten las personas es destinar al ahorro solamente “lo que les sobra” una vez que saldamos todas las obligaciones. Esto es un error por varias razones. Primero, porque en el mejor de los casos nos sobrará algo, pero muchas otras veces realmente no nos quedará saldo para ahorrar. Segundo, porque el concepto de ahorro debe ser algo prioritario en nuestras vidas si lo que queremos es crecer y crear un futuro solvente, con lo cual lo primero será pensar en ello antes de comenzar a pagar cuentas. Y finalmente, porque solo si priorizamos nuestros objetivos y designamos un porcentaje de nuestros ingresos al ahorro, estaremos organizando nuestras finanzas personales de una manera razonable y saludable.

Lo ideal es crear el hábito de separar una parte de nuestros ingresos apenas los recibimos, incluso antes de que toquen nuestras manos. Se considera que un 10% de nuestros ingresos estaría bien para ser destinado al ahorro, al menos en una instancia incial.
Pero si sos de los que tienen problemas para genera hábitos y mantenerlos en el tiempo, te contamos que  existen, por ejemplo, herramientas que debitan de nuestra cuenta un importe mensual destinado al ahorro. Este tipo de herramientas además de capitalizarnos, nos ayuda a crear el hábito del ahorro, al mismo tiempo que nos ofrecen una rentabilidad y nos protegen de la inflación.

El ahorro es la base de nuestras inversiones, y la utilización de herramientas correctas nos permiten saber que nuestro dinero está “trabajando para nosotros” y no solamente arrumbado en un rincón.

¡Manos a la obra!